La injertación de plumas, es un hecho que viene desarrollándose desde muy atrás en la Historia. En la Edad Media, los cetreros árabes ya lo hacían. Es creído que éstos lo importaron de Asia, y lo introdujeron en nuestro país hacia el año 711 (comienzo de la invasión árabe).
En la actualidad, esta práctica se suele emplear con mayor frecuencia para la reparación de las plumas de aves de cetrería, así como de aves silvestres para la posterior reinserción en su hábitat.
En lo que a las palomas mensajeras respecta, el injerto de plumas puede resultar muy útil, ya que la falta de éstas supondrá una pérdida de rendimiento del ejemplar.
Por lo tanto el injerto de plumas será una buena opción para devolver el total potencial a nuestro ejemplar, hasta la siguiente muda.
Para la realización del injerto necesitaremos:
• Plumas (Muda anterior o de cadáveres)
• Tijeras de punta fina
• Cortaúñas de guillotina (ej. de gato o perro)
• Varillas para injertar 2mm (Bambú, aluminio, fibra de vidrio)
• Pegamento de cianoacrilato (Superglue)
• Bicarbonato Sódico
• Cartulina u Hojas de papel
• Cinta adhesiva (cinta de carrocero)
Existen varios métodos para la reparación de plumas dependiendo de la zona de fractura de éstas:
1. Sustitución parcial.
2. Sustitución total.
En cualquier caso, es recomendable la realización de la sustitución total de la pluma, debido a que en la sustitución parcial es más probable que se vuelva a producir la rotura cerca de la punta de la aguja de injerto.
Para llevar a cabo la sustitución total, el proceso que tenemos que realizar es el siguiente:
![]() |
![]() |
|
1º.- Preparar el área, para lo que emplearemos la cinta adhesiva. Llevaremos hacia atrás las plumas coberteras para dejar visible la base de la pluma |
2º.- La pluma que se va a injertar se debe cortar con el cortaúñas de guillotina a unos 15-25mm desde la piel, si la fractura la tenemos en la base, limpiaremos los bordes con las tijeras de punta fina,, y pondremos una cartulina por debajo para evitar ensuciar el resto. |
|
![]() |
![]() |
|
3º.- Preparamos las varillas de injerto, para lo cual introduciremos la varilla sin cortar en el cañón de la pluma, sin ejercer presión, hasta que no entre más. |
4º.- Entonces cortaremos la varilla con una longitud similar a lo que hemos introducido. Los extremos de ésta deben ser redondeados para evitar una posible nueva fractura. |
|
![]() |
![]() |
|
5º.- La varilla ha de insertarse primeramente en el extremo libre de la pluma a injertar, fijándose a ésta con el pegamento de cianoacrilato. |
6º.- Se coloca la pluma a injertar, que debe ser la correspondiente, para comprobar la longitud a cortar. |
|
![]() |
![]() |
|
7º.- Introduciremos la varilla en el cañón y colocaremos la pluma en su posición natural. Marcaremos ambos extremos de las secciones con un rotulador para evitar posibles errores en su posterior colocación. Extraeremos el injerto, echaremos pegamento en la varilla y lo volveremos a introducir rápidamente haciendo coincidir las marcas anteriormente realizadas. |
8º.- Por último, pondremos una gota de pegamento en la junta de las plumas y echaremos un poco de bicarbonato encima para fortalecer la zona de unión. Este paso lo realizaremos 2 o tres veces tanto por la zona ventral como por la dorsal. Para limpiar el exceso, utilizaremos una lima de uñas de grano fino. |